Un jardín no es solo un espacio verde. Es extensión de la casa, refugio, zona de encuentro. Pero ¿qué pasa cuando el viento impide sentarse, la lluvia arruina una cena al aire libre o el frío lo vuelve inutilizable en invierno?
Es ahí donde entran los tipos de cerramientos para jardines. No como una barrera, sino como una forma de integrar, proteger y transformar el exterior en un ambiente habitable los 365 días del año.
Con más de 20 años de experiencia, en Cecort Sistemas lo hemos visto de cerca: un cerramiento bien diseñado no solo amplía el espacio útil, sino que aporta valor real a la vivienda.
1. Cerramientos con techos de cristal fijos o móviles
Uno de los sistemas más versátiles. Los techos de cristal para jardines pueden ser fijos, si se busca una protección permanente, o móviles, si se quiere abrir al cielo cuando el clima acompaña.
Estas estructuras se integran al entorno sin romper la vista del jardín y permiten un uso continuo del espacio, incluso con lluvia o temperaturas bajas.
Usos comunes:
- Zonas de comedor al aire libre
- Espacios chill out
- Jardines de invierno
- Áreas de jacuzzi o spa
Ventajas:
- Entrada de luz natural todo el año
- Protección contra el clima
- Apertura parcial o total, según el modelo
- Opciones de control automático con sensores
Clave técnica: es fundamental instalar canaletas ocultas y sistemas de evacuación para el agua de lluvia. En Cecort diseñamos cada techo para que drene con eficiencia y sin filtraciones.
2. Cortinas de cristal para jardines
Las cortinas de cristal son cerramientos laterales sin perfiles verticales. Se deslizan y pliegan hacia los extremos, dejando el jardín abierto cuando lo deseas, y cerrado cuando el clima lo exige.
Este tipo de cerramiento se adapta tanto a porches como a estructuras independientes. El resultado: un espacio con visión panorámica, sin renunciar al confort.
Aplicaciones habituales:
- Porches perimetrales
- Cenadores acristalados
- Galerías abiertas
- Combinación con techos móviles
Ventajas:
- Cierre completo sin renunciar a la apertura
- Aumento del aislamiento térmico
- Sistema seguro, estético y sin mantenimiento
- Posibilidad de usar durante todo el año
Recomendación práctica: usar cristal templado de seguridad, y si es posible, doble acristalamiento con cámara para mejorar la eficiencia energética.
3. Cerramientos tipo pérgola bioclimática
Una opción moderna y funcional. Las pérgolas bioclimáticas cuentan con lamas orientables que permiten controlar la entrada de luz, el paso del aire y la protección contra lluvia.
Diseñadas para integrarse al entorno sin alterar la estética del jardín, estas pérgolas pueden combinarse con laterales acristalados para crear auténticas salas exteriores.
Usos ideales:
- Terrazas jardín
- Piscinas
- Áreas lounge
- Espacios gourmet
Ventajas:
- Control total de luz y ventilación
- Diseño arquitectónico limpio
- Integración con domótica
- Alta durabilidad frente a sol y lluvia
Observación técnica: las pérgolas bioclimáticas deben anclarse sobre una base sólida y perfectamente nivelada. Si no lo está, las lamas pueden no cerrar correctamente.
4. Verandas de aluminio y cristal
Cuando se quiere crear una nueva estancia en el jardín sin perder la sensación de estar al aire libre, la veranda es la opción perfecta. Una estructura completamente acristalada, con cerramientos fijos o móviles y techo transparente o opaco.
Funciona como una habitación con vista al jardín. Se puede calentar en invierno y ventilar en verano, haciendo del exterior una zona más de la casa.
Aplicaciones frecuentes:
- Oficinas en casa con vista al jardín
- Salones de lectura
- Estancias multiusos
- Jardines botánicos particulares
Ventajas:
- Conversión de jardín en espacio útil
- Diseño elegante y personalizable
- Altos niveles de aislamiento
- Protección UV y filtrado solar con vidrios especiales
Punto clave: combinar la estructura con cristales con control solar para evitar el efecto invernadero en verano.
5. Cerramientos perimetrales de cristal o aluminio
No siempre se busca cerrar por completo un jardín, pero sí delimitarlo, protegerlo del viento o aumentar la privacidad. Para eso existen los cerramientos perimetrales con cristal, aluminio o paneles mixtos.
Se instalan como muros de protección parcial, sin necesidad de cubrir el techo, y permiten jugar con combinaciones de materiales.
Aplicaciones:
- Protección de terrazas ajardinadas
- Jardines en áticos
- Vallas de cristal en zonas verdes
- Cerramientos de bajo impacto visual
Ventajas:
- Aislamiento frente al viento
- Seguridad sin reducir visibilidad
- Mantenimiento mínimo
- Personalización en altura y opacidad
Consideración: al usar cristal, se recomienda el uso de vidrios laminados de seguridad con tratamiento antical o autolimpiante.
Elegir el cerramiento ideal para tu jardín
No existe una única respuesta. Cada jardín es distinto, igual que cada forma de habitarlo. En Cecort partimos siempre del uso: ¿para qué lo necesitas?, ¿cuándo lo vas a usar?, ¿cuánto quieres integrarlo con la vivienda?
Algunas preguntas clave para decidir:
- ¿Es un jardín privado o comunitario?
- ¿Te interesa un cerramiento fijo o móvil?
- ¿Vas a instalar calefacción o ventilación?
- ¿Te preocupa más la estética o el aislamiento?
- ¿Vas a usarlo todo el año o solo en verano?
¿Por qué elegir Cecort Sistemas?
No improvisamos con soluciones genéricas. Cada cerramiento que instalamos está diseñado a medida, calculado para durar y ejecutado con precisión. Trabajamos con aluminio de alta calidad, cristales de seguridad, motorizaciones silenciosas y acabados que resisten el paso del tiempo.
Y lo más importante: te acompañamos durante todo el proceso. Desde la medición hasta la instalación final.